¿Habéis visto las serie Rita o Borgen? Ambas son series danesas y, desde luego, es fácil percibir que la cultura danesa es muy diferente a la nuestra. En todos los sentidos, no solo por el famoso estilo de vida lento. Cuando esto ocurre, las diferencias laten en las calles. Solo al caminar por Copenhague, percibes que hay algo único en su forma de estar en el mundo. En este sentido, me parece un destino vacacional muy interesante. Además, es un país con muchos servicios y localizaciones para toda la familia, ¿queréis conocerlas, Familias Activas?
Dinamarca en familia: qué hacer
Visitar a Legoland
Desde luego, solo estas tres palabras serán suficientes para los peques, pero, admitámoslo ¡también para nosotros! Tanto los juguetes como las películas Lego nos encantan a todos. Es un parque temático situado en Billund, donde hay atracciones para los más pequeños. María José os lo contó en este reportaje hace algún tiempo. Los mayores también disfrutaremos de las montañas rusas. Por supuesto, las instalaciones estarán inspiradas en el universo Lego, con su estética particular y los personajes más importantes de sus últimas cintas.
Fortalezas vikingas y talleres
Los ancestros de los daneses son los vikingos. Han sabido aprovechar ese pasado tan especial, para convertirlo en todo un atractivo. Podemos decidirnos por pasar unos días en una fortaleza vikinga, donde suele haber museos y talleres pensados para las familias. Todos nos disfrazamos, nos maquillamos y actuamos como verdaderos vikingos. En Familias Activas somos muy aficionados a este tipo de actividades, ya que nos ayudan a todos a ponernos en el lugar de los demás y a entender la vida de otra manera.
Rutas de senderismo
La naturaleza nórdica es descomunal. En los colegios y las actividades en familia, los profesores y monitores les inculcan el respeto por la naturaleza. Sin embargo, la mejor manera de valorarla, sin duda, es vivir en ella. Que esta pase a ser una parte fundamental de su vida. Para conseguirlo, lo ideal es que conozcan y se diviertan en diferentes parques y parajes naturales. En la medida de las posibilidades de cada uno, lo mejor es que conozcan la biodiversidad que el mundo nos regala y que tenemos que preservar. Solo cuando se ama algo, se lucha por conservarlo y respetarlo.
Qué hacer en Copenhague
La capital no podría faltar en vuestro itinerario. Nadie querría dejar Dinamarca sin ver la Sirenita y hacerse una foto con ella. Pero además, podemos hacer un Picnic en el Castillo de Rosenborg. Tendréis la sensación de estar en otro planeta, con ese edificio señorial a vuestra espalda.
La naturaleza también tiene mucha importancia en Copenhague. De hecho, uno de sus lugares más emblemáticos es los Jardines del Tívoli. En ellos, encontraréis una feria dónde podrán divertirse los peques entre unos pasillos de flores espectaculares. Además, también es obligatorio dar un paseo por los canales y gozar con esos lagos impresionantes. Aquí tenéis una ruta al detalle.
Aunque hemos hablado de las fotografías cuando hemos mencionado la Sirenita, os recomiendo que aprovechéis este viaje con los ojos muy abiertos. Aprovechad cada detalle, cada esquina, cada rincón, cada flor, con todos los sentidos. Elegid lo que os más conmueva e inmortalizadlos con fotos y vídeos, pero recordad siempre mirar con los ojos del alma y no con las lentes.