A las Familias Activas nos encanta investigar y que los peques se contagien de esa actitud curiosa y exploradora. Con esta actitud, hemos descubierto el espectáculo Lapsus, desconcierto acústico, que nació también con esa misma vocación. Definido como una aventura onírica, propia del sueño, encuentro muy interesante que los niños y adolescentes se adentren en un mundo distinto al de la textualidad, para sumergirse en la experiencia sensorial. Aprender a dejarse llevar es también una enseñanza muy valiosa, ¿no os parece? Podréis hacerlo todos el 31 de enero en el Teatro Alameda de Sevilla, dentro del XXV Ciclo El Teatro y La Escuela
Lapsus, un desconcierto acústico, ¿qué sucede cuando estamos fuera del tiempo?
El espectáculo comienza en una parada de autobús. Un sitio que los poetas reconocen como un “no lugar”. Ahí, sucede algo extraño. Nos escapamos del tiempo y comenzamos a vivir fuera de la vida, ¿cómo reaccionaríamos? Desde luego, es un punto de partida interesante y, como sucede con los buenos shows, lo importante no es el desenlace, sino cómo llegamos al mismo.
A diferencia de lo que puede parecer, las palabras tienen poca importancia en la obra. La música, el silencio y el mimo destacarán por encima del texto. Por supuesto, el uso de los mismos irá más allá de las convenciones. La propuesta estética está muy en consonancia con el argumento de la obra: la búsqueda dentro de nosotros mismos, el dejarnos llevar por nuestros sentidos y nuestras intuiciones, disfrutar el momento, aceptar que no siempre podemos controlar todo, aprender a improvisar y a aprovechar lo inesperado. Aquí tenéis una muestra de lo que os encontraréis si os decidís a ir.
Como veis, se trata de una propuesta muy original y divertida, con tintes surrealistas, ideal para provocar la risa de los peques y los adultos, así como para despertar nuestra imaginación. Esa interdisciplinaridad es lo que más me seduce de vivir el teatro en familia con Lapsus, desconcierto acústico. Desde luego, el título no puede estar mejor elegido, ¿verdad?
Un espectáculo para el público familiar
Además de la representación citada el 31 de enero, el 28 y el 29 de este mismo mes formará parte de las actividades de algunos colegios. No es de extrañar que así sea, puesto que los beneficios para estos son enormes. Ya hemos hablado en otras ocasiones de que la oferta de ocio para niños es muy homogénea, por lo que muchas producciones artísticas pierden el efecto que podrían tener.
James Gleick afirma que “información” es todo aquello que modifica nuestro cerebro. Sin embargo, cuando consumimos siempre el mismo tiepo de música, leemos los mismos libros o vemos la misma clase de película… el impacto es mucho menor. Por tanto, es indispensable que los pequeños se diviertan con disciplinas artísticas y proyectos estéticos diferentes.
Además, es bueno recordar que estas serán las herramientas con las que construirán su imaginación. Por tanto, Lapsus es una oportunidad estupenda para enriquecer ese mundo con el que disfrutarán y armarán un futuro mucho más rico y adecuado a sus necesidades. El arte y la imaginación son muy útiles para conseguir un estilo de vida feliz y respetuoso con ellos mismos.
Así pues, no puedo ocultar mi entusiasmo por la originalidad de la obra. Desde luego, me parece una de esas pocas oportunidades en las que podemos divertirnos y reírnos juntos. Ver sus caritas apasionadas no tiene precio, pero que salgamos todos de la sala con la misma expresión… ¿quién quiere perderse eso?
