“Érase una vez una princesa que siempre estaba en la nubes…”. Así empieza una de nuestras lecturas veraniegas para las tardes de calor en las que mi hija de 7 años no quiere echarse la siesta… El comienzo puede llevar a error si no se ven las divertidas ilustraciones que acompañan al texto o si se corta aquí… Pero cuando continúas leyendo unas cuantas líneas más, notas que el “cuento” ha cambiado mucho… “Cuando digo que estaba en las nubes, no quiero decir que estuviera embobada soñando con príncipes y hadas madrinas. ¡Yo paso de esas cosas!”, dice una de las protagonistas. Y es esta frase la que personalmente me animó a seguir leyendo Princesas Dragón, el monstruo de las profundidades (Editorial SM), y despertó una tímida sonrisa en la cara de mi hija, reacia por el momento, a todo lo que suene a chicos, novios o amor (¡ya la llegará!).
El poder de la amistad
Princesas Dragón (autor Pedro Mañas e ilustraciones de Luján Fernández) es la historia de Bamba, Koko y Nuna, tres chicas rebeldes, aventureras, divertidas, con superpoderes y para las que las amigas están por encima de todas las cosas. Quizás esta última característica – y los dibujos de las tres princesas, una rubia, otra pelirroja y una morena, y todas ellas de ojos grandes- ha hecho que Elena se haya enganchado a las desternillantes aventuras de este trío de princesas que no necesitan un príncipe que las salve. Y mucho menos cuando descubren que, gracias al huevo de dragón, tienen poderes mágicos. Como madre, me encanta esta nueva tendencia de autores nacionales e internacionales de escribir libros donde las princesas rompen con todo tipo de estereotipos y se convierten en auténticas heroínas. Y, en el caso de Princesas Dragón, agradezco mucho que se destaquen valores y conceptos tan importantes en el desarrollo de la personalidad de los niños como son la amistad, la solidaridad, el apoyo y la ayuda…
Princesas Dragón, ¡toda una colección!
Princesas Dragón, el monstruo de las profundidades, es una oportunidad para que los niños se enganchen a la lectura, ya que está dentro de una colección formada por más de seis libros: El misterio del huevo dorado, El pantano de las sirenas, Su majestad la bruja, Rumbo a Nánabu, Criaturas mágicas y Los hermanos Tormenta. Nosotros hemos comenzado por esta aventura acuática en la que Bamba, Koko y Nuna deciden sumergirse en el océano y descubrir todos los misterios que se esconden ahí abajo aunque cuando lo consiguen -una transformada en sirena, otra en caballito de mar y la tercera en pulpo- se topan con situaciones un poco raras: la presencia de un monstruo marino, una ciudad sumergida, una abuela científica o mucha gente cavando, y ¡prometemos convertirnos en todas unas expertas en el mundo de las Princesas Dragón!
