El verano no ha dado la oportunidad de pasar más tiempo con los peques. En algunas Familias Activas nos hemos dado cuenta de que aunque vayan bien en el cole y asistan a las actividades extra escolares, tienen un déficit de comprensión en ciertas áreas, sobre todo, las que tienen que ver con las humanidades y las ciencias sociales. De hecho, cuando intentamos hablar con ellos de asuntos del día a día, es bastante habitual que se sientan muy alejados de ellas o incluso que las desconozcan. Creemos que el cine es un gran aliado para solucionar este tipo de problema.
Por qué usar el cine como complemento al cole
Es bueno que recordemos que no estamos ante un cambio generacional habitual. La sociedad en la que están creciendo nuestros hijos no tiene nada que ver con la nuestra. Por eso, si nosotros ya nos sentíamos alejados de aquello que estudiábamos, ¿no cabe comprender ese desapego ciertos conceptos históricos o sociales? Sin embargo, esto no significa que hayan dejado de ser importantes. De hecho, es probable que lo sea aún más: el conocimiento da proporciona estabilidad en un mundo tan cambiante.
En esto, el cine puede ser un enemigo o un amigo. Si usamos el cine como un instrumento solo de evasión, tenderemos a ver siempre la misma película. Nos referimos a filmes donde a pesar de haber diferentes personajes, se cuenta la misma historia. Sin embargo, también podemos ver cine en familia para que entren en contacto con realidades distintas a las que viven, así como para que visualicen diferentes épocas históricas. Pensad que para ellos, un mundo sin internet es tan de ciencia ficción como para muchos de nosotros lo era el teléfono móvil, de hecho, para ellos la radio ya es un fósil, a pesar del éxito de los podscast.
¿Os imagináis lo duro que debe ser imaginar cómo se hacía la guerra antes de los drones? o ¿cómo se divertía la gente cuando el único medio de comunicación existente era el correo postal? A no ser que tengan una imaginación prodigiosa, solo una buena película o serie o el teatro, incluso un vídeo juego, puede ayudarlos a interiorizar de verdad cómo era la vida antes del siglo XXI. Ni siquiera la literatura es tan poderosa para conseguir este objetivo, puesto que el verbo estrella para esta generación es “ver”.
En este sentido, os recomendamos que echéis un vistazo a su temario y que os lancéis a la búsqueda de las mejores películas para este curso. No hace falta que le digáis que habéis hecho esto, reaccionarán mucho mejor si lo tratamos como otra más de las actividades en familia.
Por ello, tenemos que aprovechar esa atracción por lo audiovisual para que accedan historias que les ayude a comprender tanto el mundo actual como el anterior. El resto, lo hará su propia curiosidad. A medida que se encuentre con escenas que no reconoce, comenzará a pregntarnos y ahí estaremos nosotros para contestar. Su capacidad de abosorción es ilimitada…