Esta madrugada, exactamente a las 03:54 h. y coincidiendo con el equinoccio, es decir cuando el día tiene la misma duración que la noche, se producirá la entrada del otoño. Estación que progresivamente dará paso al frío y al regreso de nuestras actividades cotidianas. Lejos quedará el verano y los interminables días de sol y vacaciones.
En Argentina, como ya explicamos en el artículo que podéis leer en este enlace, están al revés (o quizás seamos nosotros los que lo estamos). En esta fecha dan la bienvenida a la primavera, por lo que se convierte en un destino turístico ideal para los que vivimos en el hemisferio norte.
Nuestro destino de hoy será San Carlos de Bariloche, situada en el sudoeste de la provincia de Río Negro, a los pies de la cordillera de los Andes. Una localidad que se ha convertido en uno de los focos turísticos más importantes de su país, ya que desde la misma se realiza una amplia gama de actividades, tanto para los amantes de los deportes de invierno, como para los que quieren perderse en el interior de una naturaleza desbordante.
Es el único lugar en el mundo donde sus esquinas huelen literalmente a chocolate. La calle Mitre concentra un buen número de chocolaterías que harán las delicias de los más golosos de la familia. Mamuschka, Chocolates Rapa Nui, Benroth, son solo algunos de los nombres de estos establecimientos. En Mamushka, por ejemplo, tienen la convicción de hacer el mejor chocolate sobre la faz de la Tierra. Son ganadores de varios premios internacionales gracias a la cuidadosa elaboración artesanal de sus ingredientes seleccionados.
El chocolate en Bariloche apunta su tradición a mediados del siglo XX, años en los cuales recibió la llegada de numerosos inmigrantes italianos, suizos y alemanes. En 1947 la familia Fenoglio, procedente de Italia, instaló la que se considera la fábrica de chocolate que lo empezó todo. Desde entonces las chocolaterías no han parado de abrir, ofreciendo exquisitas piezas, algunas de ellas únicas, como es el caso del mítico chocolate en rama.
En el año 2014 alcanzaron todo un récord con la fabricación de la barra de chocolate más larga del mundo, con 130,18 metros y 800 kilogramos. Semejante evento atrajo a miles de residentes y turistas que se congregaron en Bariloche para seguir en directo la elaboración de la tableta.
Aquí en este enlace encontraréis más información sobre esta noticia de “grandes dimensiones”.
No hay nada mejor que acabar una jornada de deporte o excursiones en uno de estos locales. Una calle que volvería loco al mismísimo Willy Wonka de los cuentos de Roald Dahl.
Si queréis más información sobre San Carlos de Bariloche podéis entrar en su completa web pinchando en el siguiente enlace. ¿A qué ahora pensando en un buen chocolate caliente la llegada del otoño se hace más placentera?