Como es tradicional en estas fechas, en especial en la madrugada del 12 al 13 de agosto, en el Hemisferio norte se puede disfrutar de la lluvia de estrellas de las Perseidas, también conocidas popularmente como las Lágrimas de San Lorenzo. La ausencia de la Luna, y sobre todo del reflejo que emite sobre nuestro cielo, hace que podamos presenciar este fenómeno en todo su esplendor. Cada año, la Tierra atraviesa un campo de residuos dejados por el cometa Swift Tuttle, objeto que gira en torno al Sol en una órbita que llega a tardar en recorrer la friolera de 133 años. La última vez que pasó cerca del Sol fue en 1992 y no volverá a hacerlo hasta 2126.
Para disfrutar de este espectáculo nocturno en su totalidad, se recomienda alejarse de los grandes núcleos urbanos. La gran contaminación lumínica de las ciudades dificulta el visionado de las estrellas fugaces en el firmamento. Para aquellos que no puedan salir al campo este verano, CosmoCaixa en Barcelona ofrece el programa 2D Deep Sky, a través del cual nos adentraremos en el cielo más profundo donde, en los últimos decenios, los grandes telescopios y los observatorios situados en el espacio nos han revelado miles de objetos astronómicos que permanecían ocultos al ojo humano, llenando nuestras retinas con una explosión de colores, formas y dimensiones difíciles de imaginar.
En el pasado no tan lejano, las gentes de entonces tenían un mayor contacto con la naturaleza, incluida la observación del cielo estrellado. El éxodo rural hacia las grandes ciudades provocó esa desconexión que durante siglos formó parte de las vidas de muchos. Gracias a la tecnología del planetario digital nos acercaremos a las estrellas y planetas que podrían contemplarse tras el atardecer en Barcelona, siempre y cuando las luces no lo impidieran.
Esta actividad visual se completa con una pequeña charla en directo donde nos hablarán de los objetos celestes, las efemérides y las constelaciones que podremos ver esa noche. Una forma de descubrir juntos las maravillas que esconde nuestro cielo nocturno. Para más información sobre esta proyección, recomendada para edades a partir de los 14 años, podéis entrar en el siguiente enlace.