Seguimos descubriéndote escapadas para hacer con niños en cualquier época del año. Hoy nuestro destino nos lleva a Pastrana, una pueblo tranquilo y con mucho encantado situado en Guadalajara, dentro de la zona de la Alcarria, y a tan solo una hora de Madrid.
Hablar de Pastrana es hablar de un lugar que encierra mucha historia y que está muy ligado al nombre de la Princesa Éboli. Para conocer su vida, nada mejor que asistir a las visitas guiadas que se organizan los sábados a las 11.30 horas en el Palacio Ducal y que se tienen que reservar en la oficina de turismo de Pastrana (te aconsejo que lo hagas con tiempo, porque están muy solicitadas).
Se trata de un tour en el que los actores son voluntarios habitantes de esta villa Ducal y que realizan una intepretación de sobresaliente. La representación teatral se alterna con las explicaciones de la guía turística, lo que hace muy sencillo para tanto mayores como pequeños sigamos y, sobre todo, descubramos cómo Ana de Mendoza y Cerda, más conocida como la princesa de Éboli, se casó muy joven con Ruy Gómez de Silva, con el que tuvo 10 hijos, o por qué en Pastrana el punto central no se bautizó como Plaza Mayor, como es habitual en muchos puntos de Castilla-La Mancha o Castilla León, y se llama Plaza de la Hora. No te lo contaré más, porque sería hacerte un spoiler en toda regla y es mejor que tú y tu familia lo descubráis por vosotros mismos.
Otros imprescindibles lugares históricos para visitar en Villa Ducal
Otros de los personajes que ha dejado huella en Pastrana es Santa Teresa de Jesús, que llegó a esta villa invitada por la princesa Ana de Éboli. Allí fundó dos conventos de obligada visita si te acercas a este precioso rincón de la Alcarria.
Por un lado, el convento de San José, situado en la parte baja de la villa y, adosado a él, se construyó la hermosa y sencilla iglesia actual, de una sola nave y un campanario de espadaña; y, por el otro, el convento del Carmen (Museo V centenario Santa Teresa), con numerosas obras pictóricas, interesantes cuadros y tallas, entre ellos, obras de Alonso de Arco, Regino Páramo y Juan Carreño de Miranda.
No podemos, tampoco, dejar de visitar la iglesia colegiata (Museo de tapices), donde se albergan la colección de tapice gótico-flamencos del siglo XV, que narran conquistas de Alfonso V de Portugal. La visita guiada incluye el panteón de los duques de Pastrana, donde está enterrada la princesa Éboli.
Y, sobre todo, aprovecho si hace buen tiempo para pasear y dejaros perder por las estrechas calles de Pastrana y admira sus paisajes. ¿Para cuándo una visita? ¡Nosotros prometemos repetir!