Al grito de “1, 2, 3, ¡Magia!” todo es posible. El Pequeño Teatro Gan Vía de Madrid vuelve a acoger el show de magia de Javi Rufo en su ya cuarta temporada. Tanto por las críticas que habíamos leído del espectáculo como por las recomendaciones de amigos que habíamos recibido, sabíamos que este año no podíamos faltar a la cita. Y he de confesar que acudimos a ella con las expectativas muy altas. ¡Y vaya si fueron bien cumplidas!
1, 2, 3, ¡magia! , más que un espectáculo de magia
Entras en el teatro con la incertidumbre de lo que vamos a ver y sales con la certeza de que ha merecido mucho la pena. Magia de alto nivel. El montaje nos atrapó en las butacas entre la risa (y muchas veces carcajadas) y la sorpresa.
Es un show pensado para toda la familia lleno de ritmo y de dinamismo. Abriréis la boca sorprendidos en el primer minuto y ya no podréis cerrarla hasta la caída del telón.
Sobre el escenario Juan Rufo cede todo el protagonismo a los más pequeños para convertirlos en los auténticos artífices de los trucos. Y así, la gloria y los aplausos son para ellos. Como nos recuerda el mago Rufo durante el espectáculo: “¡flipas!”.
¿Puede haber mayor momento de felicidad para un niño que el saberse con poderes y capaz de hacer magia? Y es que, esa es la clave de su éxito, la esencia de su trabajo, que la magia la haga un público fascinado. ¡Ojo! Que los padres también tienen su momento de gloria. Y hasta aquí puedo contar.
Es un espectáculo muy completo, donde la comedia convive con la magia, y en el que no falta detalle. Antes de que arranque y mientras nos sentamos en nuestros asientos, alumnos de la Escuela de Magia de Ana Tamariz nos enseñan de forma particular a cada familia algún truco para ir abriendo boca.
Asombro, ilusión, emoción, fascinación, risas, vivir lo increíble… eso es la magia. Nosotros solo debemos llevar las ganas de vivirla y la emoción. e
Pero hay más. Ya se sabe, el más difícil todavía de cada mago. Para que la experiencia no se acabe al salir del teatro, durante el show todos los niños reciben un acceso personal a un área secreta de la web de Juan Rufo. La magia continúa en casa.
Y sin caer en el ‘spoiler’ los pequeños podrán aprender a su ritmo algunos juegos de magia gracias a un vídeo. Las demás sorpresas tendréis que averiguarlas vosotros.
Esta vez nuestra apuesta de ocio familiar era segura. Y es que Juan Rufo es un mago con suerte, pero también con horas de trabajo a sus espaldas, como así lo certifica el Premio Nacional de Manipulación 2019 y el Premio Nacional de Magia Infantil 2019. ¡Enhorabuena!