Si sois amantes del helado (¿y quién no? 😉 ) y vivís cerca de Miami, no os podéis perder los últimos días del Museo del Helado en Miami Beach. Por suerte, han ampliado su apertura hasta el próximo 26 de febrero y aún hay algunas entradas disponibles a la venta.
En un principio, la exposición tenía previsto cerrar a mediados de enero, pero debido a su éxito sus organizadores han decidido alargarla un tiempo más. Personalmente, tenía muchas ganas de ir en diciembre, cuando abrió, aunque no pudo ser. Así que ya estoy deseando que llegue la próxima semana para poder visitarla.
Pero ¿por qué creo que vale la pena visitar el Museum Of Ice Cream? En mi caso, no solo me encantan los helados, sino que me transportan a momentos felices. Concretamente, a los veranos de mi infancia. Estoy segura de que no soy la única. Probablemente por eso, el Museo del Helado pretende ser una experiencia que evoque a todo aquello que habíamos soñado de niños al entrar a una heladería e incluso promete superar las expectativas de nuestra imaginación.
Así pues, además de adentrarnos en un mundo rosa, a lo largo de nuestra visita pasaremos por una sala llena de ventiladores en forma de cucurucho, un techo del que cuelgan 2.500 ‘polos’ de colores y una jungla de palmeras rosas. También podremos bañarnos en una piscina llena de ‘chispas’ o columpiarnos sobre un plátano.
Tan solo tenéis que visitar su perfil en instagram (@museumoficecream) para ver que la diversión está asegurada y que es una actividad en familia genial para quienes viven o visitan Miami. Como no podía ser de otra manera, a lo largo de la exposición tendremos la oportunidad de degustar diferentes tipos de helados.
Si podéis por horarios y aún tenéis la oportunidad de elegir diferentes franjas horarias, creo que es mejor ir durante el día para poder disfrutar mejor, con la luz del sol, de los espacios exteriores del museo, sus elementos art deco y sus colores tan ‘Miami Beach’, así como de las fantásticas vistas al océano.
Pensad también que el Museum Of Ice Cream es un museo itinerante, por lo que creo que vale la apena aprovechar ahora que está en la ciudad para visitarlo. En el caso de Miami Beach, se trata de su cuarta ubicación después de Nueva York, Los Angeles y San Francisco, en las que recibió a más de medio millón de visitantes de todo el mundo. Además, debéis saber que el diseño del museo varía en cada localidad, porque quiere ser un reflejo de la ciudad en la que se encuentra.
Si os animáis, recordad que las entradas deben comprarse por adelantado en la página web del Museo del Helado (deberéis escoger una franja horaria concreta) y que la entrada de los niños menores de tres años es gratuita. Su ubicación concreta es 3400 Collins Avenue en Faena District, Miami Beach.
Para los que no seáis de Miami, pero os gustaría estar al día de las próximas ubicaciones del museo, no olvidéis seguir el museo en sus redes sociales o suscribiros a su newsletter.