Si no fuera por mi madre probablemente no estaría escribiendo estas líneas. En los ya lejanos años 80, ella me llevaba muchas semanas a los estrenos juveniles más importantes. Con ella vi “Los Goonies”, “El secreto de la pirámide” y la mayor parte de los clásicos de Disney. Hoy es un día estupendo para recordar aquellos momentos tan felices e importantes en mi vida. Hoy os traemos en nuestro blog una selección perfecta para ver con nuestras madres, un plan perfecto para emocionarnos con el mejor cine.
DUMBO (1941)
Walt Disney, en plena II Guerra Mundial, estrenó uno de sus clásicos más encantadores. Esta historia del pequeño elefante que aprende a volar, llegó en el momento más adecuado, en una época donde había mucha necesidad de volver a apelar a los sentimientos y las buenas intenciones.
Este cuento lleno de ternura arranca con las cigüeñas llegando a un pintoresco circo para repartir los bebés. La mamá elefanta recibe a Dumbo, su pequeño retoño, un elefantito con enormes orejas. El resto de los animales del circo se ríen de él, pero, su madre, siempre lo defenderá por encima de todo.
Os dejamos aquí la conmovedora canción “Hijo del corazón”.
BAMBI (1942)
Un año más tarde Disney volvería a conmovernos, dejando una huella imborrable en varias generaciones de espectadores. La película nos adentra en las profundidades del bosque, en el momento en el que nace un pequeño príncipe llamado Bambi. Su madre le enseña los valores más importantes de la vida y a valerse por si mismo, mientras da sus primeros pasos y hace sus primeros amigos.
Una de las canciones más recordadas es “Canción de primavera”.
SONRISAS Y LÁGRIMAS (1965)
Más de cincuenta años han pasado desde el estreno de este clásico musical, protagonizado por los inolvidables Julie Andrews y Christopher Plummer. La historia, enmarcada en Austria en 1938, cuenta las vivencias de María, una alegre novicia que abandona la abadía para convertirse en institutriz de los siete hijos del capitán von Trapp. Poco a poco se ganará el cariño de los pequeños, llenando el hueco dejado por su madre fallecida.
De entre las muchas canciones destaca especialmente “Do Re Mi”, rodada en las magníficas localizaciones de Salzburgo.
QUÉDATE A MI LADO (1998)
Chris Columbus, director de las dos primeras partes de “Solo en Casa” y “Harry Potter”, estrenó este melodrama protagonizado por dos excelentes actrices: Julia Roberts y Susan Sarandon. Esta taquillera historia gira alrededor de Isabel, una fotógrafa que se enamora de un hombre divorciado, que deberá ganarse el amor de sus hijos, mientras que, su madre, debe afrontar una terrible enfermedad.
Una película que sirve como homenaje a todas esas madres luchadoras, que día tras día se dejan la piel incondicionalmente. La canción “Ain’t no mountain high enough”, todo un hit a finales de los 90, sirve para representar plenamente estos valores.
MATILDA (1996)
Matilda es uno de los personajes más queridos de Roald Dahl, autor de cuentos irrepetibles como “Willy Wonka y la fábrica de chocolate” o “Las brujas”. Esta niña, curiosa e inteligente, es todo lo contrario que sus padres. En el colegio encontrará como aliada a Miss Honey, su querida profesora. Una mujer con un profundo amor por sus alumnos, que vendrá a convertirse por sus valores, en la verdadera madre de la protagonista.
Aquí os dejamos el simpático tráiler.