Empecé a esquiar con 16 años en un viaje que hicimos con el colegio, desde luego eran otros tiempos. Siempre tuve claro que cuando tuviera un hijo empezaría de bien pequeño y le transmitiría mi amor y pasión por este deporte. A mi primer hijo lo apuntamos a clases con monitor con 3 años. Fue una clase de dos horas en la estación francesa de Font Romeu. No teníamos mucha información y fuimos a la primera escuela que vimos, la Escuela de Esquí Internacional. Tenían una pequeña pista junto al telesilla en la que durante dos horas ayudaban a los peques a ponerse los esquí, darles seguridad con los mismos, dar saltitos y hacer primeras bajadas, prácticamente en plano. Soy de la opinión que los niños tienen que empezar cuanto antes mejor. Y no hay que preguntarles si les apetece o no, hay que transmitirles la pasión.
Cuando Jorge cumplió 4 años volvimos a contratar un monitor particular de esta escuela, pero también probamos otras como por ejemplo L’Ecole du Ski Français (ESF) que no os recomiendo para nada. En dos ocasiones apuntamos allí al peque, la primera estuvo en el espacio amplio que tienen en Font Romeu esquiando toda la mañana. Es un espacio propio que ellos mismos gestionan. La segunda vez fuimos con más amigos y no nos gustó nada el trato. Imaginaros que apuntamos a 4 niños. Uno de los hermanos pequeños tenía urgencia por ir al baño y como no estaba apuntado al cursillo no le dejaron entrar (con tan solo 2 años y medio). Nunca más. Cero children friendly, cero family welcome.
Luego descubrimos La Molina. Debo decir que si bien cuando era adolescente iba siempre a las estaciones de Andorra y no me gustaba La Molina, al ser madre he cambiado completamente de opinión. Me siento como en casa. Los monitores de la Escola Catalana d’Esquí (porque en la estación operan varias escuelas), son cariñosos, con muchísima experiencia con niños, mucha paciencia, sentido del humor y ganas.
El fin de semana pasado, no obstante, volvimos a Font Romeu, esta vez con una escuela nueva: El Ski Club Olimpia Ger. Os aseguro que han superado todas mis expectativas. Magníficos es poco. Las fotos, tan divertidas de los niños, que acompañan este post las hicieron todas los propios monitores. Se trata de un club de esquí en el que son socios diferentes familias apasionadas por este deporte. Ofrecen también estas actividades para grupos y las gestionan al 100%. Por ejemplo, nosotros fuimos con el AMPA del colegio. Un buen grupo de niños y bastante pequeños. Jorge y dos amigos más eran los mayores (con 6 años). El resto tenía entre 3 y 5. Muchos no habían esquiado nunca. Me contaban los monitores que habían tenido hasta alumnas de 2 años y medio que esquiaban ¡con chupete! Los cursillos duraban 4 horas. Al acabar los mismos, los peques no sólo estaban encantados y lo habían pasado fenomenal, sino que querían seguir esquiando con nosotros. No hubo ninguno que protestara. Un milagro, diría yo 😉 De verdad, hacedme caso, buscar una escuela como ésta y le transmitiréis a vuestro hijo la pasión por el esquí, lo verá como un juego, un divertimento, una fabulosa actividad al aire libre, una ilusión.
El segundo día nos cayó una nevada de órdago (la veis en las fotos). Nosotros estuvimos a punto de abandonar y no subir a pistas. Los responsables del Ski Club Olimpia Ger escogieron una estación de esquí en la que nos aseguraban podríamos esquiar todos (parecía imposible con ese tiempo), Espace Cambra d’Aze en Eyne (en Francia). Estaba convencida que sería imposible. Nos subieron a todos con una furgoneta y algunos todo terrenos para que no hubiera ningún incidente en la carretera. La máquina quitanieves iba delante nuestro todo el camino. No solo los peques pudieron esquiar, también los mayores y tuvimos un día fantástico. Mucha nieve y hasta ¡hizo sol! Suerte, podéis pensar, pues no, los monitores del Ski Club Olimpia Ger son verdaderos expertos. Desde aquí quiero darles las gracias y mi más sincera ¡Enhorabuena! Los niños lo pasaron de maravilla de nuevo.
Hay muchas más estaciones y escuelas de esquí en La Cerdanya, pero estas son todas las que yo he probado. Iré probando muchas más, sin duda. Para alojarnos volvimos a escoger el Cerdanya Resort, esta vez su maravilloso hotel de Montaña en el que no solo las vistas al Cadí son fantásticas, sino también su Spa, su piscina climatizada en la que nos zambullimos después de la jornada de esquí, su club infantil en el que los peques pueden estar dos horas con monitores jugando y pasándoselo pipa y, sobre todo, desde mi punto de vista, su buena mesa. Nos encanta cenar en su buffet, degustar los platos típicos de la zona y sentirnos como en casa, porque el hotel está lleno de familias con niños.
Mirad qué bonito es despertarse en el Cerdanya Resort y comprobar que todo lo que te rodea está lleno de nieve. Es una experiencia única para grandes y pequeños. Y si no queréis ir a esquiar podéis disfrutar de sus muchas excursiones, como la de raquetas de nieve, que espero podamos probar pronto, o esta del poblado ‘Tipi’ que os conté aquí en este blog de viajes para familias.
En el momento de subir nuestras maletas Mybag’s al coche solo estábamos pensando en volver 😉
2 Comments
Si queréis animaros a esquiar con niños en Andorra os lo recomiendo, vais a pasarlo fenomenal!
http://novaways.es/ofertas-de-esqui/
[…] mostrando en mis redes sociales y en mi blog Familias Activas a dónde vamos. Aquí ya os conté los cursillos que pueden hacer los niños en la nieve para divertirse y aprender a […]